de la República Argentina
PESAR POR EL FALLECIMIENTO DE MANUEL CAO CORRAL
La comisión directiva de la Federación de Sociedades Gallegas de la República Argentina expresó sus condolencias a los familiares, amigos y allegados del reconocido dirigente Manuel Cao Corral, quién falleció el pasado 15 de diciembre a los 75 años de edad, víctima de una larga enfermedad.
Cao Corral, artífice de la Cátedra España de la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES), fue un reconocido empresario, hijo de Manuel Cao Turnes, destacado dirigente de nuestra casa desde su fundación en 1921 hasta 1938 y uno de los principales redactores de “El Despertar Gallego”.
Por el enorme cariño y respeto que siempre mantuvo por nuestra institución, Cao Corral decidió colaborar en la restauración y puesta en valor del Salón que lleva el nombre de su padre en el Museo de la Emigración Gallega (MEGA), y también aportar gran cantidad de obras de su pinacoteca para desarrollar la muestra denominada “Pintura Rioplatense y Gallega en memoria de Manuel Cao Turnes”, que tuvo lugar entre el 29 de septiembre y el 15 de octubre de 2008.
Este exitoso empresario había nacido en Buenos Aires el 30 de enero de 1934. Sus padres eran oriundos de Galicia: Manuel Cao nació a 6 kilómetros de Santiago de Compostela; mientras que su madre, Olimpia Corral, era de Rábade, provincia de Lugo. Llegaron a la Argentina muy jóvenes, cada uno por su lado, y se conocieron en una reunión organizada por una sociedad comarcal gallega en Buenos Aires. Fruto de su unión nacieron, Olimpia del Carmen Concepción y Manuel.
Cao Corral se casó en dos oportunidades. La primera vez, contrajo matrimonio con Estela Blanca Palma, quien falleció al poco tiempo como consecuencia de un tumor maligno. En noviembre de 1957, se volvió a casar, con Dolores Fernández, con quien tuvo tres hijos: María Inés, María Alejandra y Juan Carlos.
Tras una experiencia laboral inicial con su padre, Cao Corral tuvo una larga y exitosa trayectoria comercial y empresarial en Argentina, que lo llevó a ejercer los más altos cargos dentro de su empresa y también a comandar la federación que aglutinaba a las cámaras de comercio de Buenos Aires.
Todo esto no fue impedimento para que su costado romántico, ligado a sus raíces, le posibilitara crear la Cátedra España en la UCES, entidad de la que también fue un alto directivo hasta sus últimos días.